Receta de Pote Asturiano: Cómo Preparar el Plato Tradicional Asturiano Paso a Paso
¿Quieres recrear el sabor de Asturias en casa? No busques más: la receta tradicional asturiana de pote. Este contundente plato se elabora con fabes, berza y una variedad de carnes para crear una comida sabrosa y satisfactoria. Sigue estas sencillas instrucciones paso a paso para preparar tu propio pote asturiano auténtico y disfrutar del sabor de la cocina asturiana. Si te apetece comerlo en un restaurante oviedo, te esperamos en Las Tablas del Campillín con uno premiado y muy rico. En Gijón también puedes probar la fabada asturiana en el restaurante La Taberna Asturiana. Y ya sabes que después de este plato tan rico, un cachopo es la mejor opción así que te dejamos una receta cachopo.
Ingredientes
Cuando se trata de preparar el auténtico Pote Asturiano, la fabada tradicional asturiana, los ingredientes clave son esenciales para captar los sabores ricos y robustos que definen este venerado plato. Los siguientes son los principales ingredientes que necesitarás para preparar el Pote Asturiano:
La faba asturiana, también conocida como «fabes de la granja», es un tipo de alubia blanca que es parte integrante de la autenticidad del plato. Estas judías son conocidas por su textura cremosa y su capacidad para mantener la forma durante el proceso de cocción. Suelen remojarse toda la noche para rehidratarse antes de utilizarlas en el guiso.
La berza asturiana, un tipo específico de repollo verde de hoja, añade un sabor único y ligeramente dulce al guiso. La consistencia de este repollo lo hace perfecto para el proceso de cocción largo y lento, lo que le permite mezclarse con los demás ingredientes y desarrollar una maravillosa profundidad de sabor.
El chorizo y la morcilla son embutidos tradicionales españoles que aportan un sabor rico, ahumado y ligeramente picante al guiso. Cuando se añaden al Pote Asturiano, infunden al plato una profundidad de umami y un sabor satisfactorio y robusto que es característico de la cocina tradicional asturiana.
El tocino, a menudo llamado «panceta», es un tipo de bacon sin ahumar que aporta un sabor sabroso y ligeramente salado al plato. La adición de tocino añade una capa de profundidad al guiso, complementando las demás carnes y la textura cremosa de la faba y la berza.
Las patatas son un componente clave del Pote Asturiano, ya que aportan una textura cremosa y almidonada que ayuda a espesar el guiso. Las patatas se añaden durante las fases finales del proceso de cocción, lo que permite que se cocinen completamente y absorban los ricos sabores de los demás ingredientes de la olla.
Remojo de las fabas asturianas
Antes de embarcarte en la preparación del Pote Asturiano, es fundamental dar a les fabes o alubias un remojo largo adecuado. Este paso inicial es esencial para que las judías se rehidraten y ablanden, sentando las bases para lograr la textura perfecta en el plato terminado.
Empieza por enjuagar bien las fabes con agua fría para quitarles cualquier residuo. A continuación, colócalas en un cuenco grande y cúbrelas con abundante agua fría, dejándolas en remojo durante al menos 8 horas o, preferiblemente, toda la noche. El remojo prolongado hará que las fabes absorban agua gradualmente, lo que dará lugar a una textura más uniforme y tierna durante el proceso de cocción.
Tras el periodo de remojo, las fabes habrán aumentado de tamaño y tendrán una textura suavizada, aunque ligeramente firme. Ya están listas para utilizarse en la preparación del Pote Asturiano, aportando una deliciosa cremosidad al estofado, al tiempo que mantienen una estructura delicada e intacta.
Cocción con chorizos, morcillas y tocino
Una vez que les fabes estén bien remojadas, es hora de iniciar el lento y sabroso proceso de cocción que caracteriza al Pote Asturiano. En una olla grande, combina les fabes remojadas con abundante agua, asegurándote de que el nivel de agua cubre generosamente las judías. A continuación, añade los chorizos, las morcillas y el tocino a la olla, dejando que las sabrosas carnes infundan el caldo con sus ricos sabores a medida que se van cocinando junto con las fabes.
Coloca la olla a fuego medio y lleva los ingredientes a ebullición suave. Una vez alcanzado el punto de ebullición, reduce el fuego y deja cocer a fuego lento, dejando que los sabores se mezclen y les fabes se ablanden gradualmente. Este proceso de cocción lento y suave es esencial para que les fabes y las carnes queden tiernas y absorban la rica y sabrosa esencia del caldo.
A lo largo del proceso de cocción, es importante desespumar cualquier espuma o impureza que pueda surgir en la superficie del caldo, para que el guiso siga transparente y sin restos no deseados. Esta atención cuidadosa al proceso de cocción ayudará a afinar los sabores y el aspecto del Pote Asturiano.
Después de una hora paciente y diligente de cocción a fuego lento, las fabes y las carnes habrán transformado el caldo en una base rica y sabrosa, preparando el escenario para la siguiente deliciosa adición a la olla: la berza.
Incorporación de la berza
La incorporación de la berza al Pote Asturiano es un momento que aporta una deliciosa profundidad de sabor y un vibrante tono verde al guiso. Una vez que les fabes y las carnes hayan cocido a fuego lento juntas durante la fase inicial de la cocción, introduce la berza finamente picada en la olla, dejando que se marchite gradualmente e inunde el guiso con su esencia terrosa y ligeramente dulce.
Remueve la berza en el guiso para que se distribuya uniformemente entre los demás ingredientes. A medida que la berza cuece a fuego lento en la olla, se ablanda y se mezcla con el caldo, añadiendo una maravillosa complejidad y una profundidad de sabor irresistible al Pote Asturiano. Esta incorporación gradual de la berza es un testimonio de la paciencia y el cuidado que son parte integrante de la creación de este amado plato tradicional.
Deja que la berza cueza a fuego lento con los demás ingredientes, continuando a cocer y desarrollar sus matizados sabores durante un tiempo adicional, para asegurarte de que se haya fundido completamente con los demás elementos del guiso. Los aromas combinados de la berza a fuego lento, las sabrosas carnes crean un ambiente de delicia culinaria, preludio del excepcional sabor que en breve se va a disfrutar.
Incorporación de las patatas
La introducción de las patatas en el Pote Asturiano marca una fase importante en el proceso de cocción, ya que estos tubérculos humildes pero esenciales tienen la extraordinaria capacidad de absorber los innumerables sabores del guiso, a la vez que contribuyen a su lujosa y cremosa textura. Añade las patatas cortadas en dados a la olla, sumergiéndolas suavemente en el sabroso caldo y asegurándote de que se reparten uniformemente entre los demás ingredientes.
A medida que el Pote Asturiano sigue cociendo a fuego lento, las patatas se ablandan gradualmente y liberan sus almidones naturales en el caldo, enriqueciendo la consistencia del guiso y dotándolo de una suntuosidad, un tacto aterciopelado. La adición de las patatas es un momento decisivo en la preparación del Pote Asturiano, ya que acerca un paso más al plato a su forma final y satisfactoria, lista para ser disfrutada por todos los que tienen el privilegio de deleitarse con esta obra maestra culinaria.
Deja que el Pote se cocine a fuego lento, asegurándote de que las patatas estén tiernas y cocidas a fondo, para que hayan absorbido los ricos sabores de los demás ingredientes y hayan aportado su esencia única y reconfortante al Pote Asturiano. La transformación gradual de los componentes individuales en un todo armonioso y delicioso es un verdadero testimonio de la tradición consagrada y del arte sin igual de la cocina asturiana.
Sofrito de cebolla, ajo y pimentón dulce
La preparación del sofrito, una base fragante y de sabor intenso, es un paso fundamental que añade una profundidad de aroma y sabor al Pote Asturiano. En un recipiente aparte, calienta un generoso chorro de aceite de oliva a fuego medio, y añade la cebolla muy picada, dejando que se sofría suavemente y libere su delicado dulzor mientras cuece a fuego lento hasta que toma un tono dorado.
Introduce el ajo finamente picado en la sartén, donde se mezcla con la cebolla rehogada, impregnando el aire con su irresistible aroma y añadiendo un picante, pero suave, complejo de sabor al sofrito. A medida que la mezcla de cebolla y ajo alcanza un estado de exquisita translucidez dorada, añade el pimentón dulce, removiéndolo en el aceite para que florezca y desprenda su vibrante color rojo y su rica esencia dulce y ahumada, creando una sinfonía visual y olfativa de sabores.
El sofrito, con su matrimonio de cebolla dorada, ajo suave y el cálido y abrazador aroma del pimentón, forma el corazón aromático del Pote Asturiano, añadiendo una capa de sabor rica y matizada que armoniza con los demás ingredientes del guiso, elevando el plato a nuevas cotas de excelencia culinaria.
Añadir el sofrito al Pote y ajustar la sal
Una vez que el sofrito esté impregnado de una maraña de suntuosos sabores, es hora de unirlo a los contenidos de la olla, donde aportará su rica y fragante esencia al Pote Asturiano. Incorpora suavemente el sofrito al guiso, asegurándote de que se reparte uniformemente y de que sus matices aromáticos se entrelazan en el propio tejido del plato, enriqueciéndolo con una sinfonía de sabores y aromas seductores.
Después de añadir el sofrito, tómate un momento para saborear los aromas que se elevan de la olla, un hermoso reflejo de la hábil combinación de ingredientes y de las meticulosas técnicas de cocción consagradas que se han empleado para crear este ilustre plato.
Después de incorporar el sofrito, aprovecha para probar el pote, y, si es necesario, haz los ajustes finales al condimento, añadiendo una pizca de sal para equilibrar y realzar los innumerables sabores que se entremezclan en el Pote Asturiano. Este momento de sazón cuidadosa y meditada garantiza que el guiso esté perfectamente afinado para deleitar los paladares de todos los afortunados que se atreven a disfrutar de su esplendor.
Además: manteca de cerdo, manitas y rabo
Para quienes buscan una capa adicional de sabor indulgente y suculento, el tradicional Pote Asturiano ofrece la opción de incluir manteca de cerdo, manitas y rabo, enriqueciendo aún más el guiso y elevándolo a una altura aún mayor de opulencia culinaria. La inclusión de estos ingredientes aporta una dimensión lujuriosa y untuosa al Pote Asturiano, ofreciendo una experiencia gastronómica realmente decadente.
La inclusión de manteca de cerdo, manitas y rabo introduce una profundidad de riqueza y una calidad aterciopelada y untuosa al guiso, ya que las carnes van impregnando lentamente de su deliciosa esencia la olla que hierve a fuego lento, creando una sinfonía de sabores y texturas que cautivarán los sentidos y dejarán una impresión duradera a todos aquellos que se deleiten con esta extraordinaria experiencia culinaria.
Descanso e indulgencia
A medida que se acerca la culminación de la exquisita preparación del Pote Asturiano, es importante saborear la anticipación de los sabores que han sido meticulosamente mimados y fundidos durante el proceso de cocción. Una vez preparado con cariño, déjalo reposar para que los sabores ricos y complejos tengan la oportunidad de armonizarse y madurar, garantizando que cada cucharada ofrezca una sinfonía de sabor nada menos que extraordinaria.
Con su robusta y reconfortante combinación de fabes, berza, carnes sabrosas y la esencia aromática del sofrito, el Pote Asturiano es una verdadera obra maestra de la cocina tradicional asturiana. Tanto si se disfruta como comida familiar apreciada como si se sirve a invitados de honor, el Pote Asturiano es una delicia para los sentidos, un tributo a la rica herencia culinaria del pueblo asturiano y una verdadera encarnación del arte y la pasión que definen la tradición consagrada de preparar y saborear comidas excepcionales.
Aprovecha la oportunidad de participar en la tradición consagrada de preparar y disfrutar del Pote Asturiano, y regálate a ti mismo y a tus seres queridos el incomparable placer de saborear este plato emblemático, un verdadero testimonio del legado extraordinario y perdurable de la gastronomía asturiana.
Conclusión
El Pote Asturiano es un plato delicioso y contundente que está profundamente arraigado en la cultura asturiana. Hecha con ingredientes sencillos pero sabrosos, esta receta tradicional es perfecta para un frío día de invierno o una reunión especial con amigos y familiares. Siguiendo estos sencillos pasos, puedes recrear este plato icónico y experimentar el sabor de Asturias en tu propia casa. Así que reúne los ingredientes y prepárate para disfrutar del calor y la comodidad de un delicioso plato de Pote Asturiano.