10 cosas que ver en Oviedo: Una Guía Completa para Turistas
¿Quieres explorar la hermosa ciudad de Oviedo, en Asturias, España? ¡No busques más! Esta guía destaca los 10 lugares imprescindibles de Oviedo, desde la emblemática Catedral de San Salvador hasta el encantador Casco Antiguo y todo lo demás. Prepárate para sumergirte en la historia, la cultura y la deliciosa cocina de esta encantadora y vibrante ciudad.
Catedral de San Salvador
Uno de los lugares más emblemáticos de Oviedo, la Catedral de San Salvador es una visita obligada para cualquier viajero que explore esta histórica ciudad. Esta sobrecogedora catedral, también conocida como Catedral de Oviedo, es una obra maestra de la arquitectura medieval española, cuyos orígenes se remontan al siglo IX. El interior de la catedral es un tesoro de arte e historia, con la renombrada Cámara Santa, un lugar de gran importancia religiosa y cultural. Los visitantes pueden maravillarse ante los exquisitos elementos góticos y románicos que definen la estructura, y también pueden contemplar las reliquias sagradas que alberga, incluido el enigmático Sudario Sagrado. Declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, la catedral es un testimonio del rico legado espiritual y arquitectónico de Oviedo. Cabe señalar que la construcción de esta catedral tuvo lugar a lo largo de varios siglos, dando como resultado una cautivadora fusión de estilos arquitectónicos que sigue fascinando a los visitantes de hoy en día. El ambiente pacífico y el profundo sentido de la historia que impregna el aire hacen de ésta una atracción verdaderamente ineludible en Oviedo.
Situada en el corazón del casco antiguo, la presencia de la catedral no es sólo un deleite visual, sino también un reflejo de las profundas raíces históricas y culturales de la ciudad. La oportunidad de explorar el interior y de ser testigo de los entresijos de su diseño y de los tesoros sagrados que contiene es un privilegio para todos los que tienen la oportunidad de hacerlo. La Catedral de San Salvador, con su presencia monumental, se erige como crónica viva del pasado de la ciudad y como espacio de tranquila contemplación y asombro para todos los que penetran en sus sagradas salas.
Casco Antiguo
El Casco Antiguo de Oviedo, conocido como casco antiguo, es un museo vivo que invita a los visitantes a pasear por sus calles empedradas y sumergirse en los ecos del pasado. Este laberinto de callejuelas y edificios tradicionales es un tesoro histórico, cuyos orígenes se remontan a siglos atrás. Al recorrer el casco antiguo, les envuelve una atmósfera de nostalgia y encanto intemporal, y cada rincón revela una nueva historia y una nueva maravilla arquitectónica que contemplar. La emblemática Plaza del Alfonso II, con sus edificios históricos adyacentes y sus animadas terrazas, constituye un vibrante punto de encuentro en el corazón del casco antiguo, dando vida al rico patrimonio de la zona.
En el casco antiguo, los visitantes encontrarán una variada gama de lugares de interés, desde el majestuoso Ayuntamiento hasta la ornamentada iglesia gótica de San Isidoro. Cada lugar ofrece una visión única de la historia y la cultura de Oviedo, lo que convierte al casco antiguo en una parte esencial de cualquier exploración de la ciudad. Además, la zona está salpicada de encantadores cafés, tabernas tradicionales y tiendas de artesanía, que ofrecen amplias oportunidades de saborear los sabores locales y sumergirse en el ambiente auténtico y sin pretensiones que desprende el casco antiguo. Un paseo pausado por estas calles cargadas de historia es un viaje en el tiempo, y es una experiencia que, sin duda, dejará una huella indeleble en todos los que deambulen por esta parte encantadora de Oviedo.
Parque del Campo de San Francisco
Ubicado en el corazón de la ciudad, el Parque del Campo de San Francisco es un oasis verde que ofrece un bienvenido respiro del ajetreo y el bullicio urbanos. Este extenso parque municipal, con sus jardines inmaculadamente ajardinados, serenos estanques y cautivadoras esculturas, es el lugar perfecto para un paseo tranquilo, un retiro apacible o un delicioso picnic. Además de su belleza natural, el parque alberga varios monumentos notables, como la entrañable estatua de Mafalda, que añade un toque de fantasía y encanto artístico al entorno. El tranquilo ambiente y el esplendor paisajístico del parque lo convierten en un lugar privilegiado tanto para los habitantes como para los visitantes, proporcionando un escenario idílico para relajarse y disfrutar del ambiente relajado y acogedor que caracteriza a esta ciudad histórica.
Con sus amplios espacios verdes y su rica variedad de flora y fauna, el Parque del Campo de San Francisco es un verdadero paraíso para los amantes de la naturaleza y para quienes buscan un momento de tranquilidad. Un paseo tranquilo por sus senderos ofrece la visión de elegantes cisnes deslizándose por las tranquilas aguas, y el satisfactorio susurro de las hojas en la suave brisa sirve de reconfortante banda sonora al viaje del explorador. Ya busques una escapada tranquila o simplemente un encantador entretenimiento en un entorno pintoresco, el parque se erige como emblema de belleza natural y encanto sereno en medio del bullicioso centro urbano. Es un lugar donde el tiempo parece ralentizarse, invitando a todos los que entran a deleitarse con los sencillos placeres del aire libre.
Museo de Bellas Artes
El Museo de Bellas Artes de Asturias es una joya cultural que cuenta con una impresionante colección de arte que abarca desde el siglo XIV hasta la era moderna. Instalado en un elegante edificio de principios del siglo XX, el interior del museo es una auténtica muestra de excelencia artística, con obras de renombrados pintores españoles e internacionales, así como importantes piezas de arte contemporáneo. Desde los evocadores lienzos de Francisco de Goya y El Greco hasta las impactantes esculturas de Pablo Picasso, el museo ofrece un viaje cautivador a través del siempre cambiante panorama de la expresión artística y la innovación.
Además de su impresionante colección de artes visuales, el museo alberga también una completa gama de artes decorativas y artes aplicadas, que enriquecen aún más el diverso tapiz cultural que presenta. La reciente ampliación del museo ha permitido exhibir una parte aún mayor de su inestimable colección, consolidando su posición como faro cultural y artístico de la región. Además, el compromiso del museo con la educación y la difusión cultural garantiza que no sólo actúe como depósito de tesoros artísticos, sino como un espacio dinámico y atractivo que fomente una profunda y permanente apreciación de las artes. La dedicación del museo a crear un entorno acogedor e iluminador para todos los que pasan por sus sagradas salas consolida su estatus de destino imprescindible tanto para los entusiastas del arte como para los visitantes ocasionales.
Bulevar de la Sidra (Calle Gascona)
La calle Gascona, más conocida como el Bulevar de la Sidra, es el corazón palpitante de la cultura sidrera de Oviedo, y ofrece una experiencia vibrante y envolvente para todos los que deseen adentrarse en las tradiciones icónicas de la región. Flanqueado por una ecléctica variedad de sidrerías tradicionales, conocidas como llagares, y un ambiente bullicioso cargado de los aromas afrutados de las manzanas fermentadas, el bulevar es una auténtica meca tanto para los aficionados a la sidra como para los visitantes curiosos. Aquí, uno puede presenciar los ancestrales rituales del escanciado y participar en los ricos y efervescentes sabores de la libación local en un entorno auténtico y acogedor que desprende la verdadera hospitalidad asturiana. El cachopo es un plato delicioso que deberías probar en su cuna Asturias y el restaurante más premiado por los cachopos es Las Tablas del Campillín en Oviedo. También puedes disfrutarlos además de la fabada asturiana en el restaurante La Taberna Asturiana en Gijón.
Además de su reputación como centro de producción y consumo de sidra, la calle Gascona ofrece también un auténtico festín de cocina tradicional asturiana, con su surtido de encantadoras tabernas y restaurantes que sirven platos consagrados que encarnan los sabores rústicos y reconfortantes de la región. Desde deliciosos pintxos a sabrosos guisos, la oferta gastronómica es tan variada como deliciosa, lo que garantiza que cada visitante encuentre un manjar culinario para saborear. El animado y acogedor ambiente de la calle, salpicado por los alegres sonidos de las copas y las cautivadoras melodías de los artistas callejeros, crea una atmósfera festiva y acogedora a la vez, lo que la convierte en una parada obligada para cualquiera que desee sumergirse en las arraigadas tradiciones y la cautivadora cultura local de Oviedo.
Monte Naranco
El Monte Naranco, con su imponente presencia, es un pintoresco promontorio que ofrece vistas panorámicas de Oviedo y sus pintorescos alrededores. Esta verde extensión de belleza natural encierra dos maravillas arquitectónicas del arte prerrománico asturiano: la sobrecogedora iglesia de Santa María del Naranco y la cautivadora iglesia de San Miguel de Lillo. Ambas majestuosas estructuras, testimonio del rico patrimonio histórico y arquitectónico de la región, se han ganado su lugar como Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO, sirviendo como símbolos perdurables de la importancia cultural y artística de Oviedo y sus alrededores.
A medida que los visitantes ascienden por las suaves laderas del Monte Naranco, se les ofrece un espectáculo de belleza natural y artificial, con los ondulantes paisajes y el sereno encanto de las antiguas iglesias que preparan el escenario para una exploración inolvidable. El interior y el exterior de estas iglesias prerrománicas están adornados con intrincadas y enigmáticas tallas, cada detalle susurra las historias no contadas del pasado y conserva el legado de una época pasada. Además, el esplendor natural que las rodea y el vigorizante aire fresco hacen de Monte Naranco un destino ideal para los entusiastas de la naturaleza y para quienes buscan un retiro sereno y contemplativo. Tanto si uno se siente atraído por el encanto de su significado histórico y cultural como por el impresionante esplendor de sus paisajes naturales, una visita al Monte Naranco es una experiencia convincente y enriquecedora que encierra la belleza intemporal y el legado perdurable de Oviedo.
Teatro Campoamor
Pilar de la vibrante escena cultural de Oviedo, el Teatro Campoamor es un renombrado local que ha sido el escenario de muchas ilustres representaciones y aclamadas producciones artísticas. Este edificio arquitectónicamente resplandeciente es la estimada sede de los prestigiosos Premios Princesa de Asturias, los galardones más célebres de la ciudad, que reconocen logros extraordinarios en diversos campos. El interior del teatro es un espectáculo para la vista, con su suntuosa decoración y su acústica estelar, que proporcionan un escenario encantador para una variada gama de eventos culturales, como ópera, teatro y actuaciones musicales. Su historia rica y cargada de acontecimientos, junto con su inquebrantable compromiso con las artes escénicas, cimentan la posición del teatro como emblema cultural y símbolo de excelencia artística de Oviedo.
Con su elegante diseño y sus opulentos interiores, el Teatro Campoamor ofrece una experiencia verdaderamente envolvente para todos los que cruzan su umbral, envolviéndoles en el glamour y la sofisticación de las artes escénicas. La oportunidad de presenciar un espectáculo en directo en este estimado recinto, rodeado de los suntuosos atavíos del mundo teatral, es una experiencia que deja una impresión imborrable y una profunda apreciación por el legado cultural y artístico que el teatro mantiene. La ilustre historia del teatro y su inquebrantable dedicación a las artes han consolidado su reputación como fuerza unificadora del vibrante tejido cultural de la ciudad, y continúa cautivando e inspirando al público con sus convincentes representaciones y su inquebrantable compromiso con la excelencia artística.
Iglesia de San Julián de los Prados
Reverada como una de las estructuras prerrománicas más significativas de España, la Iglesia de San Julián de los Prados, también conocida como Santullano, es un testimonio de la destreza arquitectónica y artística de la Asturias medieval. Declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, este extraordinario edificio es un repositorio vivo del arte medieval asturiano, que alberga cautivadores frescos e intrincados detalles ornamentales que ofrecen una profunda visión del rico y enigmático pasado de la región. El interior de la iglesia es un espacio de profundo significado espiritual e histórico, con su atmósfera y la maestría artística que adorna sus paredes creando una experiencia tan cautivadora como humilde. Cada pincelada y cada detalle meticulosamente elaborado en el interior de la iglesia es un conmovedor testimonio del patrimonio artístico y cultural de Asturias, y un viaje por sus sagradas salas es un viaje al propio corazón de la época medieval.
Situada en un entorno tranquilo a las afueras de Oviedo, la Iglesia de San Julián de los Prados es un remanso de paz y contemplación, que ofrece un bienvenido respiro de la vibrante energía de la ciudad. Los visitantes tienen el raro privilegio de relacionarse con un vínculo vivo con el pasado medieval, y el profundo sentido de continuidad histórica que encarna la iglesia sirve como un conmovedor recordatorio del perdurable legado de Oviedo y sus alrededores. La oportunidad de encontrarse en presencia de un ejemplo tan exquisitamente conservado de arte y arquitectura medievales es un momento de profunda resonancia, y deja una impresión indeleble en todos los que buscan desvelar los misterios y la magnificencia del pasado histórico de Asturias.
Plaza del Fontán y Mercado del Fontán
En el corazón del casco antiguo de Oviedo, la Plaza del Fontán y su mercado adyacente forman un vibrante y bullicioso centro neurálgico que encierra los encantos y las tradiciones de la ciudad. Esta histórica plaza, con su pintoresca arquitectura y su animado mercado lleno de color, es un lugar de encuentro por excelencia y un floreciente centro del comercio local y de la vida social. El mercado, con sus bulliciosos puestos rebosantes de productos frescos, artículos artesanales y deliciosas especialidades locales, ofrece una experiencia envolvente y repleta de sensaciones que proporciona una visión de los ritmos cotidianos y las delicias culinarias de la región. Los visitantes son acogidos en un mundo de colores vibrantes, fragancias aromáticas y el cálido ambiente de convivencia que impregna el mercado, lo que lo convierte en un lugar ideal para degustar los sabores auténticos y la rica herencia culinaria de Oviedo.
Además de la bulliciosa energía del mercado, la propia plaza es un cuadro de belleza intemporal y de importancia histórica, con sus suntuosos edificios y sus atractivos espacios abiertos que crean una atmósfera tan acogedora como evocadora. Ya sea buscando el recuerdo perfecto, un fragante ramo de flores o un momento de respiro en medio del vibrante pulso de la ciudad, la Plaza del Fontán y su mercado ofrecen un delicioso y cautivador caleidoscopio de vistas, sonidos y sabores. Es un lugar donde convergen la rica historia de la ciudad y su espíritu dinámico y contemporáneo, creando un tapiz de experiencias culturales y sensoriales tan diversas como deliciosas. Una visita a esta encantadora plaza y a su emblemático mercado es una exploración del alma misma de Oviedo, en la que cada paso revela las arraigadas tradiciones de la ciudad y su carácter vibrante y en constante evolución.
Camino Finlandés
El Camino Finlandés, o Paseo de Valdeflora, es un paseo escénico y pintoresco que serpentea por las laderas meridionales del Monte Naranco, ofreciendo a los visitantes una escapada tranquila y refrescante al abrazo prístino de la naturaleza. Este serpenteante sendero, con sus verdes bosques, miradores panorámicos y sinuosos caminos, se extiende a lo largo de 5,4 kilómetros, proporcionando una experiencia serena y envolvente a paseantes, corredores y amantes de la naturaleza. Los contornos ondulantes del sendero y sus seductores paisajes naturales crean una sensación de suave exploración y descubrimiento, guiando a los visitantes a través de un reino de tranquilidad y belleza inalterada que contrasta notablemente con el enérgico latido de la ciudad.
Al recorrer el Camino de Finlandia, el encantador encanto del Monte Naranco se despliega en cada giro, descubriendo vistas cautivadoras de Oviedo y sus paisajes circundantes. El ritmo pausado y el vigorizante abrazo del entorno natural ofrecen un bienvenido interludio frente al ritmo urbano, proporcionando una oportunidad para la reflexión tranquila, la unión pausada con la naturaleza y la participación en momentos de alegría sencilla y sin adornos. Ya sea en el florecimiento de la primavera, en el calor del verano, en los matices del otoño o en el abrazo del invierno, el Camino de Finlandia es una expresión atemporal y siempre cambiante de belleza natural y serena contemplación, que invita a todos a participar en el modesto esplendor de la naturaleza y en el vínculo inquebrantable entre la humanidad y el mundo natural. Se trata de un destino en el que el espíritu de aventura armoniza con el tranquilo abrazo de la naturaleza, lo que lo convierte en una parada esencial para quienes buscan deleitarse con el encanto inalterado del esplendor natural de Oviedo.
Catedral de San Salvador de Oviedo
Vale la pena mencionar una vez más el profundo significado de la Catedral de San Salvador de Oviedo, una maravilla arquitectónica e histórica que representa el latido espiritual y cultural de la ciudad. Esta joya arquitectónica es un testimonio del rico pasado y el perdurable legado de Oviedo, con sus sagradas salas y tesoros sagrados que continúan inspirando y cautivando a todos los que tienen el privilegio de contemplarlos. La oportunidad de relacionarse con la grandeza intemporal de la catedral, de pasear por sus magníficas cámaras y de ser testigo de la enigmática belleza de sus artefactos sagrados es una experiencia de resonancia incomparable.